Fútbol 

Era un jugador tan malo, tan malo; que en la repetición en vez de meter un gol lo tiraba fuera.

- Mamá, mamá, en el colegio me llaman ultra.
- Niño, a la cama sin cenar.
- HI-JA DE PU-TA, HI-JA DE PU-TA

Un aficonado a un equipo muy malo se promete no afeitarse hasta que su equipo no gane un partido de liga. Por fin, al cabo del tiempo, su equipo deja de perder y gana un partido. Euforico, se afeita la barba tal y como se prometió, y vuelve a su casa a hacer el amor con su mujer. Dispuesto todo, se mete a oscuras en la cama con su mujer, y esta le dice:
- Pepe, se répido que ya va a llegar el desgraciado del barbudo.

Donde está una buena corrida, se puede quitar el fútbol.
- ¡Jóder, y los toros!

Un futbolista se lesiona durante un partido y se va al médico.
- Doctor -le dice-, tengo un desgarro en el tobillo.
- Muy bien -responde el médico-, bajese los pantalones inmediatamente y pongase a cuatro patas.
- ¿Pero si es un desgarro en el tobillo por qué tengo que ponerme a cuatro patas y bajarme los pantalones?
- Haga lo que le digo, aquí el médico soy yo.
El futbolista obedece y el doctor lo embotona sin piedad.
- ¡AHHHHHHHH!, exclama el jugador.
- Muy bien. Esto es un desgarro. Lo que tiene usted en el tobillo es un ES-GUIN-CE.

Un atracador apunta con la pistola a un traunseúnte y le dice:
- ¡Levante las palmas!
- ¡Qué sé yo, ponga una equis?

- Oye, ¿Por qué no teneis a nadie en la portería?
- porque el portero costaba una pasat gansa y salía más barato poner un portero automático.

¿En qué se parece un informático a un portero?
En qué ambos se creen que tienen el mejor equipo y no paran de sacar cosas de la red.

En la final de la Copa de Europa el equipo de un hincha no hace más que fallar ocasiones de gol, cuando una mujer de al lado le dice:
- Oiga, deje de comerse las uñas, que ya es mayorcito.
- ¡Y a usted que más le da!
- Vale que se coma sus uñas, pero deje en paz las mías de los pies.

Una mujer está hablando con su vecina:
- ¿Qué, estará contento tu marido? Ya sé que ganó ayer el Barcelona al Real Madrid por 9-0.
Fíjate tú si estaba contento que me hizo el amor por cada gol que había marcado el Barça...
- Anda, pues tú también estaras contenta.
- Sí, contenta sí estoy, pero ya no vuelvo más al estadio.